Texto: Marcos 4:35-41; Salmo 89:9 (también Lucas 8:22-25)
Objeto: Un póster de un barco sacudido en una tormenta.
Resumen: La historia de Jesús parando la tormenta.
Mira lo que traje hoy. ¿Vistes la figura? ¿Qué es? [Una tormenta] Quiero contarles una historia de Jesús cuando estuvo en una tormenta. Jesús había estado enseñando todo el día y estaba cansado. Él les dijo a sus discípulos que lo llevaran en una barca y cruzaran el lago Gennesaret, o como era más comúnmente llamado El Mar de Galilea. Jesús estaba cansado y sabía que le llevaría una hora o más cruzar el lago, así que tomó una almohada y se echó una siesta. ¿Tomas una siesta a la tarde cuando estás cansado? Jesús había trabajado duro todo el día y se durmió enseguida.
Luego el viento comenzó a soplar fuerte. Las olas estaban rompiendo sobre un lado de la barca y comenzó a llenarse de agua. Los discípulos sabían que si no hacían algo rápido, la barca se hundiría. Ellos estaban asustados por la tormenta. Algunas veces nos suceden cosas malas en nuestra vida y no sabemos donde ir. Los discípulos sabían que podían contar con Jesús, así que fueron a pedirle ayuda. ¿Te asustas con los relámpagos y los truenos en los días tormentosos? [Si] Los discípulos zamarrearon a Jesús para despertarlo y dijeron Maestro, Maestro, ¡perecemos! [Lucas 8:24] asi que qué hizo jesus? Cerró sus ojos y les dijo “déjenme en paz”, ¿no ven que estoy durmiendo?” No, por supuesto que no. Jesús está siempre y se preocupa cuando estamos en problemas o en peligro. Él nos ama y quiere cuidarnos.
Jesús se alzó y le dijo al viento que deje de soplar y a las olas que se calmaran. Así fue como dijo al cielo ¡”silencio, estate tranquilo!” Y dijo a las olas “acuéstate, estate calmo.” ¿Alguna vez tuviste un perro que no paraba de ladrar a la noche? Si tuviste, entonces podrás saber que es un bozal. Un bozal es algo que se les pone en el hocico a los perros para que no puedan ladrar. Qué es lo que Jesús les dijo a aquellas olas.* y el viento cesó, y había una gran calma. El viento dejó de soplar y las olas se calmaron hasta que el lago era tan liso como el vidrio. Luego Jesús se dio vuelta y los discípulos se sorprendieron. Él les preguntó ¿por qué tienen miedo?
Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe? Esto les hizo tener más miedo. Ellos nunca habían visto a nadie mandar al viento y al mar así y verlos obedecer inmediatamente. Jesús es el hijo de Dios quién creó todo, tiene el poder de controlar todo lo que hizo. En Salmo 89:9 leemos Tú tienes dominio sobre la braveza del mar; Cuando se levantan sus olas, tú las sosiegas. Siempre que las tormentas de la vida traten de sobrepasarnos, Jesús se levanta por nosotros y las quita de nuestro camino. Lo único que necesitamos es tener fe y confiar en Jesús. El tiene el control y nos protegerá.
* Palabra griega siopao (see-oh-pah’-oh) y significa silencio, mudes involuntaria. Palabra griega que aún se usa es phimoo (fee-mo’-oh) y significa bozal.
©1998 por Jim Kerlin. Todos los derechos reservados.
Escritura tomada de la Biblia de Estudio NUEVA VERSION INTERNACIONAL®. El derecho de autor© 1973, 1978, 1984 Sociedad Bíblica Internacional. Todos los derechos reservados mundialmente. Utilizado con el permiso de la Sociedad Bíblica Internacional.